
El sector inmobiliario es uno de los que más cambios ha experimentado en los últimos años. La forma de enfocar este ámbito de actividad y la manera de trabajar en él ha cambiado de forma sustancial. Si bien hace unos años el sector vivía un auge importante en los últimos tiempos muchos cambios han hecho que el acceso a un mayor rango de viviendas e inmuebles sea mucho mayor.
Sin embargo, cuando se trabaja en este sector son muchos los agentes que suelen intervenir. En toda operación de compra o de venta de un inmueble interviene el comprador, el vendedor y, en la mayoría de los casos, la agencia.
Acceder a inmuebles en venta es hoy en día más sencillo, pero aún la mayoría de los usuarios acuden a agencias inmobiliarias que pueden ayudar en gran forma a conseguir un buen resultado. Las negociaciones y la gestión asociada a este tipo de operaciones son complicadas y contar con profesionales que puedan ayudar en la tarea siempre será mucho mejor.
Uno de los aspectos importantes en la gestión de cualquier compra o venta de inmuebles por parte de profesionales del sector son los honorarios de mediación inmobiliaria. Son operaciones en las que se manejan cantidades de dinero importante para hacer frente no solo a la compra del inmueble, sino también a los impuestos, documentación necesaria y pagar los honorarios de los agentes inmobiliarios.
Aspectos a tener en cuenta en las operaciones inmobiliarias
Como hemos visto, la intermediación inmobiliaria cumple una función muy importante y necesaria en las operaciones de compraventa de inmuebles. Los profesionales que trabajan en este ámbito suelen cobrar unos honorarios de intermediación inmobiliaria que están previamente establecidos y que pueden ser de una cuantía muy interesante.
No obstante, en beneficio de que las operaciones se desarrollen de la mejor forma y que no haya sorpresas por parte de los clientes ni de los profesionales implicados es conveniente tener en cuenta varios aspectos.
Contrato de intermediación
Como profesional del sector inmobiliario al iniciar cualquier proceso de compraventa debes tratar de establecer un contrato de intermediación. El contrato de intermediación es importante porque te permitirá establecer la relación que se generará entre el vendedor y el agente inmobiliario.
En este contrato se fijan las condiciones de trabajo conjunto entre el vendedor y el agente inmobiliario. Las funciones principales del agente serán facilitar el proceso de venta, asesorar y prestar apoyo, pero no puede en ningún momento actuar en representación del vendedor ni tomar decisiones por él.
Honorarios de intermediación
Se trata de un aspecto que debe quedar muy claro desde el primer momento. De hecho, uno de los aspectos que es recomendable que quede muy claro y bien especificado en el contrato desde el primer momento son los honorarios de intermediación inmobiliaria.
Esto es debido a que la información debe ser clara y directa entre ambas partes si se quiere mantener una relación de confianza. No hay que olvidar que ha existido tradicionalmente mucho debate en torno al cobro de estos honorarios por parte de los agentes inmobiliarios.
Debemos tener en cuenta que la labor que desarrolla el agente inmobiliario es fundamental, ya que se trata de un profesional con experiencia en la compraventa de inmuebles que tiene un conocimiento muy profundo y profesionalizado del sector y de la variabilidad de precios que se vive en él. De esta forma, es necesario que se tenga conciencia de que estos profesionales asumen riesgos y aportan mucho valor en la operación contribuyendo en gran medida a que pueda llevarse a cabo. Por ello, deben cobrar unos honorarios de intermediación inmobiliaria que deberán estar claramente recogidos en el contrato desde el primer momento.
Generalmente, el importe a cobrar por este concepto por los agentes inmobiliarios debe fijarlos el propio agente en función de su conocimiento y del tipo de venta, del importe y de la dificultad que pueda tener conseguir una venta rápida. Este importe suele ser un porcentaje sobre el importe final de la operación. De esta forma, los agentes fijarán también los plazos en los que tienen previsto desarrollar su labor orientada a conseguir la venta en las mejores condiciones.
No hay que olvidar que para que el proceso finalice de forma correcta hay mucha documentación que generar y que debe ser gestionada por estos agentes, como puede ser el propio contrato de arras.
Gestión en Exclusiva
Cuando se firma un contrato en exclusiva, autorizas a la inmobiliaria a vender tu casa y que sólo esa agencia pueda venderla. Bajo este escenario, el propietario no puede gestionar la venta con ninguna otra agencia, ya que incumpliría el propósito principal de este tipo de contratos.
Normalmente los contratos en exclusiva, se fijan en 6 meses o 1 año. Durante este periodo, si se cierra la operación, la agencia devengará sus horarios íntegros tanto si ha participado como si no en la mediación de venta.
Pruebas del trabajo realizado
Aunque todos los térmicos de los honorarios de intermediación inmobiliaria quedarán bien recogidos en el contrato es recomendable que estos profesionales realicen un adecuado seguimiento de la labor que están desarrollando y dejen constancia de todos los trabajos realizados para conseguir la venta de la vivienda o inmueble.
Por ello, es importante que en todo el proceso se haga un registro de las conversaciones mantenidas, emails enviados, documentación generada y cualquier otro aspecto que haya sigo gestionado para conseguir la venta del inmueble. En el ámbito jurídico el derecho de cobro de honorarios de intermediación inmobiliaria por parte de estos profesionales está debidamente justificado y viene avalado por la normativa.
Hay situaciones en las que los clientes tratan de evitar el pago de estos honorarios tratando de realizar ellos mismos el cierre de la venta con los compradores. Sin embargo, esto no tendrá ningún efecto si en el proceso de puesta en contacto del comprador con el vendedor ha tenido una influencia decisiva la intervención del agente inmobiliario.
Aunque posteriormente la venta hayan querido gestionarla directamente ambas partes, si ha quedado recogido en el contrato inicial y la intervención del agente inmobiliario puede demostrarse, los clientes tendrán la obligación de abonar estos honorarios establecidos desde un principio.
Lo principal para que no surjan problemas es que la información está bien clara desde el principio. De esta forma, no surgirán discrepancias y se desarrollará todo según los términos establecidos.
La labor de estos agentes inmobiliarios es fundamental y será muy difícil reemplazar su experiencia y sus conocimientos del sector si se quiere tener éxito en la operación.